

Estoy entre ellos, entre sus cuerpos trabados en lucha, el torneo de la vida.
Demuestra por álgebra
que el espectro de Shakespeare
es el abuelo de Hamlet.
UN HOMBRE INMORTAL ,
Ma foi , l'esprit manque,
Hay locuras para la esperanza,
hay locuras también del dolor.
Y hay locuras de allá,
donde el cuerdo no alcanza,
locuras de otro color.
Hay locuras que son poesía,
hay locuras de un raro lugar.
Hay locuras sin nombre,
sin fecha, sin cura,
que no vale la pena curar.
Hay locuras que son como brazos de mal:
te sorprenden, te arrastran,
te pierden y ya.
Hay locuras de ley, pero no de buscar.
Hay locuras que son la locura:
personales locuras de dos.
Hay locuras que imprimen dulces quemaduras,
locuras de Diosa y de Dios.
Hay locuras que hicieron el día,
hay locuras que están por venir.
El amor apagó el foco,
Dicen que yo no te conozco
que yo debo estar loco
soñando en tu querer
Saben que estoy enamorado
así desesperado
que ya no sé qué hacer
Que me salgo en las noches
a llorar mi locura
y a contarle a la luna
lo que sufro por tí
Que abrazado de un árbol
le platico mis penas
como aquellas parejas
del oscuro jardín
Si me llaman el loco
porque el mundo es así
la verdad sí estoy loco
pero loco por tí
Que me salgo en las noches
a llorar mi locura
y a contarle a la luna
lo que sufro por tí
Que abrazado de un árbol
le platico mis penas
como aquellas parejas
del oscuro jardín
Si me llaman el loco
porque el mundo es así
la verdad sí estoy loco
pero loco por ti
Era entre nosotros un juego de riesgo
Pero miente ahora la larga mirada
Ilustra algo, Quizá sólo
Cierta palabra aparece llorando
Suena salada, suena de mar
Quien sabe, entre nosotros,
Se trataba de amor
Pero no hablo de ti,
yo hablo de otro
El juego era mío,
lúcido y tramposo…
Yo hablo de mí,
de mí que he disfrutado
De mí que he amado
Y que he perdido…
Y no encuentro nada de decir o de hacer…
Pero entre nosotros se trataba de amor…
Era entre nosotros un juego de riesgo,
Juego de vida, duro y falso…
Porque quererse y desearse
Hecho fingido y ser perdido
En este momento, es tarde,
y digo sólo
Se trataba de amor y no sé cuánto.
¡ Qué facultad tan increíble de pronto poblar este sueño-vida con una mitología propia donde cualquier evento ya es explicado fuera de una razón acotada, descubrir a la locura y no al ser humano esclavizado por la moda del día !
-Has vencido y me entrego.
-¡Miserable! -grité con voz ronca por la furia que cada sílaba que pronunciaba parecía atizar-. ¡Miserable! ¡Impostor! ¡Maldito villano! ¡No permitiré... no permitiré que me persigas hasta la muerte! ¡Sígueme o te atravesaré aquí mismo con mi espada!-
Su táctica consistía en perfeccionar una imitación de mi persona, tanto en palabras como en hechos, y Wilson desempeñaba admirablemente su papel.
Tengo la convicción de que no existes
y sin embargo te oigo cada noche
te invento a veces
con mi vanidad o mi desolación o mi modorra
del infinito mar viene su asombro
lo escucho como un salmo
y pese a todo
tan convencido estoy de que no existes
que te aguardo en mi sueño para luego.