Un perfume canta en mí como un aire obsesivo:
todo mi cuerpo se recupera de su menor bocanada,
y yo creo que yo aspiro un aliento de hada,
que él sea cercano o lejano, que él sea vago o estridente.
.
Hijos del aire que los recolecta o bien que los destierra,
ellos son húmedos, bochornosos, fríos o calientes como él,
y como el aire aún más, cuando la Luna brilló,
ellos tienen más de sabor habiendo más de misterio.
.
¡Oh sí! dentro de la sombra espesa o en el medio día,
se atiborra de perfúmenes como de un pastizal,
¡es bueno olfatear la urna de la Naturaleza,
aspirar el recuerdo, y respirar el amor!
.
Estos dulces asfixiadores también lentos que impalpables
divinizan el éxtasis en el ambiente de los sofás,
y las locas Inés y los pálidos Raphas
sazonan el olor de sus besos culpables.
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Ellos son para mí alivio de innombrables trayectos
en el aire silencioso de las soledades taciturnas,
y ahí, casándose en mis sueños sin límites,
saben dar encantos a los más repugnantes objetos.
.
Toda la mujer amada está dentro del perfume tibio
que sale como un suspiro de los frascos o de las flores,
y les adormece el aburrimiento, el viejo Rey de los dolores,
con este invisible y delicado remedio.
.
Sea bendito, verde primavera, tan querido en los corazones heridos,
puesto que resucitando la flora sepultada
tú aperfumas de gracia y de melancolía
los paisajes muertos que el invierno dejó.
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A todos los corazones desconsolados, a todas las urnas viudas,
les conservaron el olfato piadoso, y les tiene bonito
vivir así como un cadáver en el fondo de su tumba,
los perfúmenes son siempre las ilusiones nuevas.
.
Si ellos se equivocan, despejados de toda mezcla impura,
reptando sobre el color, solapando la música,
se está como arrastrado lejos del mundo físico
¡en un paraíso azul casto como el azur!
.
Pero cuando mezclándose en las fragancias de la mujer
de las que la sola acritud corrompe la razón,
ellos hacen un sutil y embriagador veneno
que aspiran a grandes rasgos las ventanas nasales en ardor.
.
Es el Vértigo en los flujos y reflujos villanos
que suben al cerebro y pierden la conciencia,
y lo mataba entonces con despreocupación
si la Dama de los perfumes decía: "¡Muere sobre mis brazos!"
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Cómplices familiares de candiles y de cirios,
ellos son tristes o alegres, castos o corruptores;
y más de un santuario tiene impuras fragancias
que van a hablar de amor a las mucosas de las vírgenes.
.
Para ellos, el espíritu se aguza y la carne se ennoblece;
ellos cargan de languidez un pañuelo de batista,
y para el sensual y fastuoso artista,
ellos son los encubridores del sueño y del olvido:
.
- Hasta eso que la infecta y mordaz mezcla
de aserrín de bosque, de afrecho y de fenol
espolvorea su cuerpo frío, color azul de vitriolo,
dentro del cofre del gusano y de la podredumbre.
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Canción popular de Carlos Mejía Godoy,
de Nicaragua la tierra de Ruben Darío.
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SON TUS PERJUMENES MUJER
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Son tus perjumenes mujer,
los que me sulibeyan,
los que me sulibeyan,
son tus perjumenes mujer
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Tus ojos son de colibrí,
como me aleteeeeeyaaaannnnn..
ay como me aleteeeeeeeyaaaaaannnnn..
tus ojos de colibrí.
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Son tus perjumenes mujer,
los que me sulibeyan,
los que me sulibeyan,
son tus perjumenes mujer
.
Tus labios pétalos en flor,
como me soripeyan,
como me soripeyan,
tus labios pétalos en flor.
.
Son tus perjumenes mujer,
los que me sulibeyan,
los que me sulibeyan,
son tus perjumenes mujer
.
Tus pechos cántaros de miel,
como reverbereyan,
como reverbereyan,
tus pechos cántaros de miel.
.
Son tus perjumenes mujer,
los que me sulibeyan,
los que me sulibeyan,
son tus perjumenes mujer
.
Tu cuerpo chucaro mi bien,
ay! como me almareeeeyaaaaa,
ay! como me almareeeeyaaaaaaa,
tu cuerpo chucaro mi bien.
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IL POSTINO
domingo, 25 de julio de 2010
¿SON TUS PERFÚMENES MUJER?
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